Las consultas con el médico suelen ser muy breves. Recuerda que tienen muchas personas que atender. Por eso, durante el servicio médico, hay veces en las que sueles hacer las preguntas cuando ya vas saliendo del consultorio. O, aún peor, te surge la duda cuando ya has llegado a casa porque no te dio tiempo y eso es irritante. No obstante, ese corto periodo de tiempo podría ser crucial para conocer cuál es el grado de tu riesgo de tener cáncer.
Tienes 15 minutos y hablar sobre los riesgos del cáncer no es fácil. Sin embargo, es indispensable que te empapes de información. Esto podría ser crucial para tu vida.
Estas son algunas preguntas que debes hacer a tu médico sobre tu riesgo de tener cáncer:
¿Cómo afectan los antecedentes familiares de cáncer a mi salud?
Siempre dependerá del tipo de cáncer y de cómo se le haya manifestado a tu familiar. Por eso siempre es bueno preguntarle a tu médico. Conversa con tu familia sobre los antecedentes que existen y ponlos en conocimiento del médico. No se trata de una pregunta tonta, ya que la respuesta puede ayudar a prevenir el cáncer en tu vida. Aunque es importante destacar que no todos los cánceres son hereditarios, nuestro historial es vital para entender los riesgos existentes.
¿Desde qué edad se deben tomar medidas preventivas?
La mayor preocupación de los médicos al enterarse de la existencia historial de cáncer en tu familia es iniciar la detección pronto. Si a tu madre y a tu hermana les detectaron cáncer de mama antes de los 50 años de edad, por ejemplo, tu médico podría recomendarte hacerte una mamografía antes de los 40 años. Esta información es vital para determinar tu riesgo de tener cáncer. Por otra parte, si lo que tienes son familiares con cáncer colorrectal, presta atención. Porque puede que tu médico no quiera esperar hasta los 50 años de edad para realizar tu primera colonoscopia.
¿Cómo puede afectar a mi trabajo mi riesgo de cáncer?
El lugar de trabajo tiene mucho que ver con tu riesgo de tener cáncer aunque no trabajes en una refinería de petróleo o de carbón. Son muchos los lugares y ambientes que representan un riesgo latente de desarrollar cáncer. Por eso, se recomienda discutir con el médico cualquier lugar de trabajo que presente una alta exposición potencial de productos químicos. Ya sea de gas, vapores y químicos. Es importante que en tu trabajo tomen todas las medidas pertinentes para evitar el desarrollo de cualquier problema. Esto incluye el uso de mascarilla, calzado adecuado y batas cuando sea necesario.
¿Qué debo buscar en mi piel?
La piel es una de las zonas de nuestro cuerpo más visibles y, por lo tanto, más fáciles de analizar. Sin embargo, la mayoría de nosotros no nos examinamos la piel de forma habitual. Mucha gente solo lo hace cuando siente dolor, una quemadura o algo similar. Una gran cantidad de personas ni siquiera piensa en el cáncer de piel. Sin embargo, es algo que es muy fácil de tratar si se detecta a tiempo. Tu médico puede enseñarte las estrategias para detectar lunares anormales o lesiones en la piel. De esa manera, puedes evitar cualquier preocupación.
¿Tengo que dejar de fumar o el alcohol?
Quizás sientas que el médico invade tu privacidad. Apenas llegas al consultorio y ya empezó a preguntar cosas. ¿Fumas? ¿Consumes bebidas alcohólicas? ¿Cuántas parejas sexuales has tenido? Piensas que eso no es problema del médico y le mientes. Sin embargo, eso es precisamente lo que va a impedir determinar lo que tienes o lo que te pueda suceder. Debes sincerarte y no te preocupes por lo que le digas, que eso quedará entre tú y tu médico. Los médicos necesitan conocer todos tus vicios. Debes indicarle también si tienes algún tipo de hábito saludable. Con estos datos, tu médico podrá evaluar con precisión si tienes riesgo de cáncer. Por lo tanto, si tienes un hábito de fumar en secreto, aunque sólo sea un cigarrillo de vez en cuando, es la hora de confesar.
¿Qué puedo hacer para reducir mi riesgo?
Es importante que preguntes a tu médico cómo reducir tu riesgo de tener cáncer. No se puede hacer mucho con un historial familiar o cuando se trata de quemaduras solares si no estás preparado. Pero, ya que estamos hablando de dejar hábitos, te podemos decir que tu doctor puede recomendarte un montón de conductas saludables para evitar el cáncer.
Entre los hábitos que tu médico no dejará de mencionarte están:
- Dejar de fumar.
- Mantener un peso corporal saludable. Es el paso más importante para la prevención del cáncer. El exceso de peso está relacionado con el riesgo de varios tipos de la enfermedad.
- Usar protector solar.
- Comer muchas frutas y verduras.
- Hacer ejercicio.
- Acudir a una consulta médica de rutina, al menos. una vez al año.
Ahora ya lo sabes, tu médico puede ser tu aliado en la lucha contra el cáncer. Solo realiza las preguntas apropiadas y comparte la información que sea pertinente y que él te pregunte. No temas tocar este tema.
Al contrario, si eres una de las personas que sienten pavor de recibir un diagnóstico de cáncer, será mejor hablar.
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