Mitos sobre pérdida de peso totalmente Falsos

Cada vez más, la pérdida de peso es un tema que preocupa a gran parte de la sociedad mundial. Gracias a este aumento de interés, han aparecido muchos estudios que nos han ayudado a comprender cómo funciona nuestro cuerpo y qué debemos hacer para perder el peso que nos sobra. Sin embargo, también han aparecido una serie de mitos sobre la pérdida de peso que son completamente falsos. ¿Quieres conocerlos? Continúa leyendo.

8 Mitos Falsos sobre la sérdida de peso

Existen muchos falsos mitos respecto al adelgazamiento que es necesario desmentir, porque nos perjudican a todos haciéndonos creer que estamos haciendo lo correcto. Muchos de ellos no solo nos impiden bajar de peso, sino que además ponen en peligro nuestra propia salud.

1. Es necesario pasar hambre

Para perder peso no es necesario pasar hambre. De hecho, pasar hambre es contraproducente. Si pasamos hambre, es porque nuestro cuerpo no está recibiendo los nutrientes necesarios para funcionar correctamente. Por eso, cuando finalmente ingiramos alimentos, decidirá acumular más grasas pasa suplir esa falta de nutrientes. Y esto ralentizará nuestro metabolismo, cosa que nos hará aumentar de peso, o al menos sí bajar más lentamente. Esto actúa de la misma manera cuando nos saltamos alguna comida pensando en que así perderemos más peso o compensaremos algún exceso.

Sin embargo, es cierto que cuando empezamos una dieta de pérdida de peso, al principio notaremos sensación de hambre. Esta sensación no significará que nuestro cuerpo tiene una falta de nutrientes, sino que, al estar acostumbrado a comer más cantidades o alimentos más saciantes (como por ejemplo carbohidratos), siente que no está recibiendo lo mismo, y su respuesta es esa sensación de hambre. Es algo similar al “mono” en una adicción, y desaparecerá en unos días, en cuanto tu estómago se acostumbre a comer las cantidades que realmente son necesarias.

Para perder peso correctamente, será recomendable hacer las 5 comidas mínimas diarias, ya que al no dejar demasiado tiempo entre comidas evitará que nos entre hambre y piquemos entre horas. Además, también nos ayudará a no comer demasiado en cada comida, y así también controlar la cantidad que ingerimos. Recuerda siempre que el desayuno debería ser la comida más importante del día, y la cena la más ligera.

2. Las dietas “Milagro” funcionan

Las dietas “milagro” son esas típicas dietas que se ponen de moda cada x tiempo. Son esas dietas que te prometen bajar mucho en muy poco tiempo, siempre de una manera poco saludable. Este tipo de dietas normalmente restringen la mayor parte de los alimentos necesarios para un correcto funcionamiento de nuestro organismo, lo que provocará una falta de nutrientes en nuestro cuerpo. Esto evidentemente hará que bajemos de peso, porque nuestro organismo tirará de reservas para suplir esa falta de nutrientes. Sin embargo este “método” tiene diferentes desventajas:

• Es peligroso para la salud: No tomar los nutrientes adecuados para el correcto funcionamiento de nuestro organismo será perjudicial para nuestra salud, ya que podríamos sufrir debilidad, mareos, desmayos e incluso sufrir de anemia. Además, algunas dietas “milagro” que abusan mucho de la ingesta de proteínas, podrían dañar seriamente nuestros riñones e hígado.
• El “efecto yo-yo”: Cuando dejamos de hacer una dieta “milagro” y volvemos a nuestra alimentación normal, incluso aunque controlemos más que antes la ingesta de alimentos calóricos, aparece el temido “efecto yo-yo”, es decir, volveremos a recuperar rápidamente todo lo que hemos perdido. Esto ocurre porque realmente la dieta que estábamos siguiendo no era sana para nuestro organismo, y la única razón por la que perdimos peso es porque nuestro cuerpo ha intentado funcionar bien utilizando nuestras reservas.
• Puede fomentar un aumento de peso posterior: No solamente recuperaremos ese peso que hemos perdido, sino que es posible que, además, ganemos algún kilo extra. Esto ocurre, de la misma manera que te comentaba antes, porque nuestro cuerpo, al haber notado una falta de nutrientes esenciales, decidirá almacenar grasas “extra”, por si vuelven a faltarle en otro momento.

Como siempre, lo ideal es llevar una dieta equilibrada, donde comas un poquito de todo sin excesos. Recuerda siempre que deberás moderar la ingesta de carbohidratos y de grasas, pero nunca eliminarlos por completo.

3. Es necesario hacer mucho ejercicio

Es cierto que acompañar la dieta con ejercicio nos ayudará mucho en esa dura tarea que es la pérdida de peso. Sin embargo, no será necesario hacer una gran cantidad de ejercicio para perderlo. De hecho, empezar a hacer ejercicio de manera descontrolada para perder peso no te hará ningún bien, ya que podría provocarte alguna lesión, y probablemente te produciría una hambre voraz que podría poner en peligro tu dieta.

Además, una gran cantidad de ejercicio requerirá que aportes más hidratos y grasas a tu cuerpo, y si estás siguiendo una dieta para perder peso, podrías aportarle menos nutrientes de los necesarios, pudiendo provocarte mareos, debilidad, desmayos e incluso anemia. En la constancia está la clave.

Hacer ejercicio moderado durante media hora cada día, caminar una hora al día o coger la bicicleta en lugar del coche para ir a trabajar o a clase, será suficiente para ayudar a tu cuerpo no sólo a perder peso, sino también a tonificarlo. Piensa que si pierdes una cantidad importante de peso, tu carne se quedará flácida. Hacer ejercicio moderado de manera regular te ayudará a tonificarla y reafirmarla, para lucir finalmente ese cuerpo que siempre has deseado.

4. Las pastillas para adelgazar funcionan

Las pastillas para adelgazar siempre prometen una bajada de peso rápida y sin esfuerzo. Sin embargo, al igual que las dietas “milagro”, todo lo rápido y sin esfuerzo suele tener una parte oscura que no te cuentan. Las pastillas para adelgazar pueden ser muy perjudiciales para tu salud.

En su lugar, puedes optar por tomar suplementos de hierbas y productos naturales, que te proporcionarán una ayuda extra para la pérdida de peso, siempre combinadas, claro, con una dieta equilibrada y ejercicio moderado.

5. El uso de laxantes ayuda a perder peso

El uso de laxantes nos ayudará a eliminar sustancias de deshecho que estén acumuladas en nuestro cuerpo, por lo que podríamos pensar que son beneficiosos para la pérdida de peso. Sin embargo, el abuso de laxantes puede debilitar el sistema digestivo y producir trastornos relacionados con el abdomen.

Es cierto que las dietas para adelgazar pueden causar un estreñimiento leve, pero normalmente suele remitir si aumentamos la cantidad de fibra que ingerimos mediante alimentos integrales o suplementos naturales. Así pues, el uso de laxantes solamente estaría recomendado si, después de incrementar la ingesta de fibra, seguimos teniendo problemas para ir  de vientre.

6. Los alimentos “Light” son siempre la opción más saludable

Es obvio que cuando decidimos seguir una dieta para adelgazar debemos restringir los alimentos ricos en grasas o en azúcares. Y puede que pienses que consumir todos esos alimentos catalogados como “light”, “sin grasas”, o “sin azúcares” que podemos encontrar en todos los supermercados sea la mejor opción. Sin embargo, debemos tener muy en cuenta la composición de estos alimentos, porque detrás de esa “fachada sana” normalmente se esconden componentes no tan sanos:

• Bebidas y zumos “light”, “cero”, o “sin azúcares (añadidos)”: Lo único que nos indican este tipo de bebidas es que tienen menos azúcares que las bebidas normales, no que no tengan. Esto quiere decir que estaremos consumiendo igualmente más azúcar del recomendado. Por otra parte, normalmente este tipo de bebidas suelen contener otras sustancias poco saludables, como aromatizantes, colorantes y conservantes artificiales, edulcorantes artificiales que sustituyan ese azúcar eliminado, o grandes cantidades de cafeína, entre otros.
• Leche de soja endulzada: Tanto para la gente intolerante a la lactosa como para la gente que está intentando perder peso, la leche de soja puede ser una buena sustituta de la leche de vaca, ya que es mucho menos calórica y no es perjudicial para el organismo. Sin embargo, será importante leer la composición de la etiqueta, ya que en muchos supermercados la leche de soja que se vende está endulzada y aromatizada con componentes artificiales que sí pueden ser perjudiciales.
• Barritas de cereales: Las barritas de cereales son consideradas una manera saludable de tomar un tentempié a media mañana o a media tarde, además de una buena fuente de fibra. Sin embargo, la mayoría de ellas tienen más azúcares de los recomendados, por lo que no será recomendable consumirlas si estás intentando perder peso. En su lugar podemos optar, por ejemplo, por tomar una pieza de fruta o una pequeña rebanada de pan con fiambre de pavo o jamón de york.
• Bollos de salvado: Los bollos o panecillos de salvado pueden parecer una opción saludable para acompañar un café, un yogur o un zumo, por ejemplo para el desayuno o la merienda. Sin embargo, a pesar de contener una buena cantidad de fibra, suelen contener demasiadas grasas y azúcares.
• Sushi: Pese a que el sushi pueda parecer una opción deliciosa y saludable, muchos de ellos pueden estar elaborados con queso crema, mayonesa y otros condimentos que aumentarán fácilmente sus calorías. Así pues, es recomendable que antes de consumirlo te asegures de todos los ingredientes que contiene.
• Comidas precocinadas: Muchas de las comidas precocinadas que podemos encontrar en el supermercado nos ofrecen, aparentemente, una opción saludable y rápida de preparar una comida cuando no tenemos demasiado tiempo disponible. Sin embargo, la mayoría suele ser rica en sodio, grasas y otros compuestos que no serán recomendables para tu cuerpo si estás intentando bajar de peso.

7. Debemos evitar completamente los carbohidratos

Se suele asumir que los hidratos de carbono, o carbohidratos, engordan y hay que evitarlos por completo cuando estamos intentando adelgazar. Sin embargo, son fundamentales en nuestra dieta diaria. La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que es necesario divulgar los beneficios otorgados por los carbohidratos, principalmente el de ser un vital aporte al funcionamiento intestinal, al desarrollo muscular y de actividad física, además de apoyar la función cerebral.

Es cierto que hay que moderar su consumo, ya que aportan una gran cantidad de energía a nuestro cuerpo que, si no se consume, se almacenará en forma de grasa. Sin embargo, este aporte de energía es esencial para nuestro día a día. Además, una de las funciones de los carbohidratos es prevenir la excesiva acumulación de grasas en nuestro cuerpo, por lo que también nos ayudarán a perder peso.

• Los carbohidratos están presentes en la leche y sus derivados, en la miel, en las legumbres, en los cereales, en las pastas, en las frutas y en las verduras. Si estamos intentando perder peso, deberíamos moderar su consumo, pero nunca eliminarlos por completo.
• Las verduras no contienen demasiados hidratos de carbono, por lo que se podrán consumir en mayores cantidades.
• Respecto a la fruta, es mucho más rica en azúcares, por lo que se recomienda consumir un par de piezas al día, intentando que no coincidan con las principales comidas, ya que contendrán más hidratos, sino como tentempié a media mañana o a media tarde.
• Los cereales contienen bastantes hidratos de carbono, por lo que se recomienda tomar diariamente no más de 50-100 gramos.
• Respecto a los lácteos, también serán muy importantes en nuestra dieta diaria, por lo que se recomienda tomar la leche y sus derivados desnatados, para evitar consumir demasiados hidratos.
• Finalmente, las pastas y las legumbres deberán moderarse más, ya que normalmente de manera diaria ya tomamos suficientes hidratos con los demás alimentos. Se recomienda tomarlos dos o tres veces por semana.

8. La margarina es más sana que la mantequilla

Se suele decir que la margarina es más sana que la mantequilla porque tiene menos grasas. Sin embargo, la margarina es uno de los alimentos más procesados y químicamente alterados que se venden hoy en día.

La margarina se compone de un gran número de compuestos para nada saludables, como las grasas trans (que aumentan el colesterol malo y reducen el bueno), radicales libres, emulsionantes, conservantes, hexano y otros disolventes tóxicos. Además, incluso aunque en la propia etiqueta especifique que es “sin grasas”, lo cierto es que pueden ponerlo legalmente mientras contenga menos de 0,5 gramos, por lo que es posible que sí las contengan aunque sea en poca cantidad.

Para asegurarte de que realmente contiene 0 grasas trans, deberías mirar que en ningún lugar de la etiqueta ponga “hidrogenado”. La hidrogenación es el proceso que se usa para aumentar la vida útil de la margarina y darle la consistencia dura, y es a través de este proceso como se producen las grasas trans y otros tipos de toxicidad de la margarina.

Come sano y empieza a perder peso ya

Desgraciadamente esta lista podría ser eterna, porque día a día surgen falsos mitos y gente que quiere aprovecharse de nosotros mediante dietas y pastillas milagrosas. Lo importante es que aprendas a mantener una dieta sana y equilibrada, acompañada de un ejercicio moderado, esa es la clave.

Y recuerda que si quieres acompañarla con algún suplemento o ayuda, asegúrate siempre de que sea 100% natural, hay muchos alimentos y hierbas que podrán ayudarte a perder peso.

Seguro que conoces algún falso mito sobre la pérdida de peso que no hemos recogido en esta lista. ¿Te animas a decirnos alguno tú? ¡Déjanos un comentario!

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